Bitácora de Aurora Pimentel Igea. Crónicas de la vida diaria, lecturas y cine, campo y lo que pasa. Relatos y cuentos de vez en cuando.

sábado, 23 de julio de 2011

Cloro y lejía (Los olores del verano, 1)

No es el cloro lejía pero casi. Polvo blanco o líquido que al salpicar mancha. Es el olor de las piscinas, antes más fuerte, ahora a menudo impercéptible, ha mejorado.

En los skimmers, que son unos coladores pequeños donde pasa el agua camino a la depuradora, a veces encuentro una pequeña rana y la suelto. En la hierba salta camino a las adelfas.

Lejía también asociada al verano. Los cuartos de baño como están más limpios es con lejía, y las cocinas. Lejía en el cubo del agua, en la fregona, en la bayeta.

Antes echábamos una gotita de lejía al lavar las verduras.

Cloro y lejía dejan un olor de verano.

3 comentarios:

Naranjito dijo...

Olor y dolor a cloro en los ojos despues de disfrutar en la piscina municipal con los amigos (!quillo, tenemos los ojos coloraos!); Olor a lejía cuando vuelves a casa de tu abuela y tu madre y tus tías han limpiado la casa por enésima vez, (!que bien güele); olor a la ropa recien lavada con.... perdona, Aurora, seguro que sigues con los olores del verano y no me quiero adelantar.
Te espero impaciente.

José Miguel Domínguez Leal dijo...

Esos olores es como si restablecieran el orden natural de las cosas.
Besos.

Máster en nubes dijo...

Naranjito, esa manía de limpiar por enésima vez es muy de mujer española, de algunas al menos. Voy a seguir con otros olores, un abrazo y gracias por leer.

JM, eso es, da sensación de orden el olor de lejía.