Bitácora de Aurora Pimentel Igea. Crónicas de la vida diaria, lecturas y cine, campo y lo que pasa. Relatos y cuentos de vez en cuando.

jueves, 6 de noviembre de 2008

...Lágrimas (II y final)


Lloramos. Es un tópico, pero lloramos desde que nacemos. Tenemos hambre: lloramos. Tenemos frío: lloramos. Nos duele algo: lloramos. Queremos que nos hagan caso: lloramos.

Un bebé llora como primera forma de expresión, de comunicación."Había comido, no hacía frío en la habitación, y seguía llorando: no era normal, le pasaba algo". Me acuerdo de tantas amigas palpando la tripa de sus hijos, tan pequeños, muditos salvo por el lloro. "Sí, tiene gases, eso le pasa, por eso llora." Elemental, pero como no hablan no sabes qué les pasa. Pero lloran, emiten una señal.

Hay personas, incluso familias, más lloronas. No significa que sientan más, que sean más sensibles. Simplemente que por naturaleza o educación expresan más. Eso es todo.

Lágrimas de tristeza, frecuentes en la infancia. Tristezas muy elementales que permanecen toda la vida, aparecen y desaparecen también. "No me hacen caso en el cole", "no me ajuntan", "estudié y no me aprobaron", "quieres más a mi hermano que a mí", "quería una play pero los Reyes me trajeron otra cosa y quiero la play", etc.

Todo esto, tan básico, permanece y causa algunas tristezas bastantes sencillas. Luego hay otras más complicadas. ¿Qué causa esas otras tristezas?

A veces la misma verdad que nos provoca la risa desencadena las lágrimas. El mismo encontronazo con la verdad puede servir para reírse y para llorar.

A menudo el daño que uno puede cometer, el que se comete, las limitaciones propias, morales y de inteligencia, las ajenas también, pero menos, salvo las que pueden hacer más daño.

Da tristeza también la soledad, el gran mal, uno de los grandes males. No hablo del silencio interior o de una soledad temporal, es otra cosa. Esta tristeza es de origen infantil, es básica.

Hay mucha soledad en nuestro mundo. Hay soledades muy profundas, muy cerradas, que provocan muchas lágrimas. A veces es peor, ya ni se llora. No hay consciencia de ella.

Lágrimas de vergüenza, nos pillaron en algo que nos da mucho reparo, alguién se ríe de nosotros, con nosotros a veces. Y se puede pasar mal. Muchas lágrimas de algunos niños es porque no quieren ser objeto de risas, también porque no quieren reconocer algo que habitualmente es poco importante: te gusta tu compañera de clase, no lo niegues, Javier. Más adelante se hace más complejo pero es exactamente igual. Y se llora de vergüenza, ni siquiera de arrepentimiento, aunque también.

Lágrimas que a veces son de rabia. Son peores. Alguien se siente herido. Le dieron por dentro, quizás sin intención, casi seguro que sin intención, pero quedó ahí la herida, se la toca o no se la toca pero se agranda, produce dolor, a veces más, a veces menos. Y de vez en cuando se llora de rabia por un dolor presente que fue pasado.

Me acuerdo de una alumna, la sorprendí llorando en el pasillo, pensé que la había suspendido y la hice pasar al despacho muy preocupada. "No, no, que no, que he aprobado, es sólo que... " bua, bua, lloraba. "Dani", pongamos que era un "Dani", siempre hay un "Dani". No hablamos más allá del nombre, Dani. Ella sólo lloraba, yo le pasaba los kleenex y la acompañaba. Luego me la encontré a la salida de una Misa de Pascua de Resurección, preciosa, en San Jorge, ya casada. No pregunté cómo se llamaba su marido, por si acaso.

Lágrimas de alegría. Hay muchas, muchísimas. Son a veces mucho más frecuentes, gracias a Dios.

Te dice algo un amigo que te emociona, sabes que está ahí. Se te cae una lágrima de agradecimiento.

Ves un gesto de alguien de infinita paciencia y cariño. Te brillan los ojos.

Nace un niño, menganita por fin se ha quedado embarazada. La vida siempre produce alegría, muchas veces emoción, se te saltan las lágrimas.

Alguien quiere mucho a alguien. Igual que com-padeces ... com-partes esa emoción de alegría como te sale: con lágrimas.

Tu amiga del alma por fin encuentra trabajo. Liberas con ella tensión por el agobio de los últimos meses, lloras por algo que a la gente le hará sonreír y pensar que estás como una cabra: ha encontrado un excelente trabajo, sabías que lo necesitaba mucho.

Hay muchas más, muchas más.

Dependiendo de los momentos de la vida uno puede estar especialmente sensible para las lágrimas de alegría: necesitas afirmar que hay muchas personas buenas, que somos todos limitados, que todos podemos sorprender para mal, pero también para bien.

Que muchas cosas salen bien todos los días para muchas personas.
Y que te emociona verlo.
Siempre.
Por favor, los kleenex siempre a mano.

18 comentarios:

sunsi dijo...

Opinaría demasiado, Máster. Sabiduría la tuya que ha sido capaz de analizar las lágrimas. No es sencillo.

Una pequeña aportación. Llorar es muy sano. Limpia, echa fuera angustias reales o inventadas... Te quedas como nueva.

Gracias por escribir

Máster en nubes dijo...

Hola, guapetona, opina, opina,... más... Sunsi, seguro que de lágrimas y risas sabes mucho.

Tienes pinta virtualmente hablando, claro.

¿Y qué me dices de ver películas y llorar como una magdalena? Podríamos hacer un listado...

Me voy a comer con unas amigas: nos vamos a reir seguro.

Suso dijo...

Un consejo que nadie me pide: deja reposar las entradas al menos un día entero...¡vas como una moto!.

Otro consejo que nadie me pide:si la entrada es muy larga, divídela en capítulos. Le das emoción y das tiempo a respirar:)...;)...:-)


Pero haz lo que quieras, que es lo que vas a hacer.

Máster en nubes dijo...

Gracias, seguro que tienes razón, Suso, y sé que lo dices en buen plan.

Estoy segura que facilitaría la lectura, los comentarios o lo que fuera si siguiera tus consejos.

Pero es que en este momento este blog es para mí un espacio de aclaración y afirmación, algo más personal que social.

Supongo que hay mil razones para escribir un blog, mil estilos. La mía no es de tipo social.

Cuando escribo no pienso en la comodidad del que lee, ni en si entran o no todos los días, ni en generar un debate o que comenten.

Es egoísta, egocéntrico, lo sé.

A lo mejor luego cambia, pero ahora es así.

En este momento necesito más "decirme" cosas y dejarlas por escrito -es una manera de pensar que tengo-, que abrir un diálogo o un debate, que ser cómoda incluso para quien lee.

Lo siento. Lo siento muchísimo,pero es lo que me sale.

No me he explicado seguro, voy a quedar fatal, pero no importa.

En fin, con no entrar quien se marée basta, yo creo. No sé.

Gracias, en cualquier caso, Suso.

Tomo nota aunque parezca que no.

Y seguiré tus consejos cuando pueda, no cuando quiera. Ahora no puedo.

sunsi dijo...

Sí te has explicado.Perfectamente. Y Suso seguro que lo ha entendido igual que yo... creo.

Hay tantos tipos de blogs como personas. También el sexo influye. Se nota a la legua si el blog es de una mujer o de un hombre. Las mujeres, a veces, solemos aclarar nuestras ideas mientras hablamos o escribimos. Lo hacemos, no para convencer de algo, sino para desarrollar algo que nos baila entre el corazón y la cabeza...y no sabemos dónde acabará hasta que terminamos.

Igual he dicho una barbaridad ; no es bueno generalizar. Pero la mayoría de las veces suele ser así. Nos comprendemos a nosotras mismas a través de un monólogo o de un diálogo con nosotras mismas.

Si he dicho una chorrada, me lo decís.

Un saludo a los dos.

Suso dijo...

¡Oído cocina!: se te ha entendido perfectamente, y no has dicho ninguna chorrada- ninguna de las dos.
Y perdona por haber entrado como elefante en chatarrería, es lo que tiene leerte todos los días.
pero tienes tus razones, que son las que de verdad importan.

Máster en nubes dijo...

Jo, qué gusto que aunque me explique tan mal la gente sea tan lista o tan buena o lo que sea que lo entiende tan bien todo.

¡Gracias, compañeros del metal, muchas grtacias!

Sunsi, de verdad, es que lo has clavado. Qué tía, ves crecer la hierba.

Suso, mira, tú no eres un elefante, y me lo has dicho fenomenal, sin machacarme ni ponerme ejemplos, eres muy majo.

De verdad que yo también he dicho "oído cocina" y te lo agradezco UN MONTÓN, cuando pueda escribiré para que el blog sea más cómodo.

Me voy a ver una película de Iñaki Arteta, me han invitado al estreno de "El infierno vasco". Mañana os cuento, si puedo, también si puedo.

Maripaz dijo...

Master, que facilidad tienes para escribir ...eres como un torbellino de ideas...
Entiendo lo que dices , sobre lo que escribes, que es un espacio de aclaracion y afirmacion .Todos necesitamos espresarnos a traves de lo que escribimos (unos mas que otros)
Con la escritura, volcamos nuestro interior con la magia de las palabras y lo mostramos a los demas tal cual , afirmamos asi, nuestra propia personalidad ,nuestra riqueza, unica ...

Aun haciendo caso del maestro Suso ,tu,sigue mostrandonos a tus seguidoras ,el encanto y la naturalidad de tus escritos
Cada uno, sabra coger de ellos,lo que le interese
Un abrazo

Modestino dijo...

Siempre me ha avergonzado algo ser llorón, pero al final uno se acostumbra a vivir con ello.

Ah, y lo del blog es para mí también una terapia .... aunque me gusta que sea una terapia compartida.

Máster en nubes dijo...

Gracias, Mari Paz, qué cariñosa eres.

Modestino, gracias, algo llorón se te "percibe" a distancia, pero claro es que te pones a veces unas músicas que... no me extraña que llores.

No, que es broma, que es envidia lo que tengo de tu selección y memoria musical, de verdad. Acabo de entrar en tu blog ¿y tú quién eres de la foto, si puede preguntarse?

Otro tema más pragmático que se me olvidó: lágrimas por el dinero, por lo caro que está todo... Ahora mismo estoy llorando...

Estoy poniendo casa nueva, no tenía apenas nada porque vivo con mi madre. Se me había olvidado lo caro que es poner una casa. Estoy asustada, esto es un chorreo bestial. Todo.

Da igual lo que sea. Electrodomésticos, un pastón. Colchones, otro pastón. ¿pero de qué son que son tan caros?, no sé, algún sitio donde sentarse...

Todo, todo, todo, carísimo.

Anónimo dijo...

Reconozco que una de las cosas que más me violentan es tener a alguien llorando a mi lado. Lo que me sale de dentro es decir: "No pasa nada, no llores, guapa".
Pero quizá lo hago por mí, para evitarme el mal trago del lagrimoteo, el "no valgo para nada", "todo lo hago mal", "soy un desastre", etc. que suelen acompañar al lloriqueo intenso.

Quizá cuando una mujer se pone a llorar, lo único que quiere es que le des un abrazo, digas poco y calles mucho.
Aunque también reconozco que cada mujer es un universo con sus propias leyes de la física. De modo que, en realidad, tengo pocas teorías al respecto.
Como dice Sunsi, muchas veces queréis echar fuera todas las pequeñas mortificaciones que os tenéis que tragar.

Los seres humanos somos una piltrafilla. A veces, nos damos cuenta de eso, y nos sentimos dichosos a raudales (yo he llorado a veces de felicidad). A veces, nos tomamos mal esto de ser una piltrafilla y lloramos de infelicidad.

Lamento resultar machista, pero eso de llorar parece que está más en los niños y las mujeres. Aunque los hombres también lloran.
Supongo que en parte se debe a que los hombres tenemos otros mecanismos de echar lastre, y darle a la catarsis. Y nos da mucha vergüenza mostrar nuestra debilidad.

Anónimo dijo...

Master. El arte de amueblar una casa consiste en hacerlo poco a poco, empezando por lo más imprescindible. Hacerlo de otra forma se convierte en "helarte de amueblar". No tengas excesiva prisa por querer tenerlo todo a punto, créeme, el disfrute de poner una casa nueva está en ir haciendo, o comprando, o poniendo cosas un día tras otro. Es la magia que mantiene la ilusión de lo nuevo.

Cierto es que necesitas una cocina (en tu caso más), un dormitorio, un sillón, una mesa, o esa lamparita que te hagan acogedora la casa, lo demás poco a poco. Darse tiempo para ver y comparar, si es que dispones de él, te hará elegir mejor.

Y si tienes que llorar, pues llora, que eso relaja mucho (al menos a mi). Aquello de sonrisas y lágrimas también se da al contrario, así que ya vendrán las risas. No debe haber nada peor que no poder llorar, bueno si, no poder sonreir.

Máster en nubes dijo...

Os echaba de menos a ambos.

José María, lo que ha dicho Sunsi es que nosotras escribimos para que podamos pensar mejor. Lo de las mortificaciones es otro tema, pienso yo. Pero no sé, ya me lo explicarás en persona, soy muy torpe y a veces no veo las cosas.

Respecto a lo de llorar los hombres, no sé qué te diga, sarraceno infiel, creo que hay excepciones, muchas. Mi madre no llora nada, mi padre lo hacía a moco tendido y era un tío muy tío. Va en pueblos, en familias. En naturalezas.

Cordobés: no puedo poner la casa entera por una sencilla razón, no tengo dinero. Además como tú dices creo que las casas te van "pidiendo" las cosas a medida que vives en ellas. Es como muchas recetas de cocina: harina, la que te pida (la que admita).

No me gustan las casas puestas de una vez, además. Pero es que además simplemente no puedo. No me agobia vivir con poco: necesito una cama, una nevera (llena, eso sí, para mí comer es fundamental) y una cocina para poder cocinar, una ducha que funcione y un teléfono (para colgarme con amigo/a un ratín, el movil o skype me sirve). Son ya muchas cosas, muchas.

Luego ya se puede caer el mundo, estar lleno de cajas, sin muebles o todos despatarrados: sobrevivo bien.

Bueno, que tengo que seguir currando.

sunsi dijo...

No sé si te dije que cuando leí que te mudabas me puse en tu piel y me eché a temblar. Es que he hecho una cuantas y cuando terminaba me tenían que recoger con pinzas. Es muy agotador. Igual es que yo me mudaba con niños.

Ideas, ideas... A ver... Una cosa que llena mucho y no da sensación de vacío son las paredes. Claro, que no sé si tienes cuadros, pero igual sirven láminas que te gusten.. de momento. También te puedes hacer la idea de que eres oriental. Las jarabas (¿se dice así?) son muy baratas y se pueden lavar. Es original sentarse en el suelo, como si hicieras taichí. Lo del colchón reconozco que no tiene arreglo. Tienes que dormir bien y en esto mejor que no escatimes. También están los palets, esas maderas donde se apoyan los materiales de construcción. Se barnizan, les colocas cuatro ruedecitas (Leroy Merlín) y ya tienes una mesa auxiliar o para la tele... ¿Te gusta IKEA? Allí la imaginación al poder. No sé... Te mando energía positiva desde Tarraco. Te iba a decir que imagines que durante un tiempo, además de oriental, eres hippie, pero me ha parecido demasiado fuerte.

Un beso y mucho ánimo.

Máster en nubes dijo...

Gracias, Sunsi, mi mudanza está siendo "fácil", es más un tema de "ir poniendo las cosas" que no tengo... ja ja...

Gracias por las sugerencias, muchas gracias, son todas bienvenidas. Cuadros y libros es lo que tengo, poco más... Pero me encanta casi... esa sensación de provisionalidad... Lo único que me agobian son las pelas, la verdad...

Anónimo dijo...

Nunca creí que una mudanza de otro/a diera para tanto. Es la primera vez que comparto una mudanza "virtual".

No sé como he llegado a este enlace pero te sugiero que lo veas. Es curioso cómo se puede agudizar el ingenio para amueblar un espacio, y con poco dinero, creo.

http://mocoloco.com/archives/010036.php

Máster en nubes dijo...

Eres genial, cordobés, me estoy riendome sola, bueno, que me voy... a llevar cosas al Boalo, cada día un poquito...

Hery dijo...

Yo he llorado leyendolo, y m siento feliz. Lo guardo para llorar otro día o para cuando llore y no sepa porque.