Lo sé, el mejor escribano hace un borrón y las cursis siguen ejerciendo una atracción casi atávica en muchos hombres. Téorica, en la práctica miras a su mujer, es un poner, en un par de fotos y te dices: no, este tío ha dado con la mejor, una manera de mirarle que tiene la tía. Y ni rastro de cursi, 100% Raquel Welch. Vaya suerte que tienes, Balú.
Mujeres cursis. La Preysler es una cursi de tomo y lomo. Tuve una discusión con una prima que me hablaba de ella con unción, y yo erre que erre, tía, la Preysler es cursi hasta en cueros (precisamente donde no es fácil serlo, casi imposible).
En fin, no puedo entender como no ven algo que para mí es evidente.
Sí, se puede ser guapa y cursi, es el caso de muchas modelos, que son cañón de la baraja, actrices, gente de la farándula. Guapas y cursis.
Ocurre que, de nuevo, si salen en televisión se hacen cursis, o en un reportaje del Hola, o en las revistas: el estilismo es lo peor. Aclaro: estilistas, las/los que preparan a la modelo/actriz y lo que sea (se ocupan del vestuario, etc.) pa' la foto. ¿Resultado? Una afectación de narices ... que no queda ahí, en la foto, se la llevan a casa a veces. Una pena.
Pero hay feas cursis. Maria Teresa de la Vega es un ejemplo diré que paradigmático.
Y luego hay extrañas combinaciones.
Por ejemplo, el cruce de un rupestre y un cursi da un nacionalista. Lo contó Boadella el otro día y yo lo suscribo.
¿Alguien ha visto algo más cursi que el nacionalismo? Efectivamente, hay que ser cursi, pero un rato cursi, para pensar que alguien es diferente -ya no digo mejor- por haber nacido, es un decir, en Bilbao o en Granollers.
Otro cruce: cursi y mosquita muerta. Bingo, Diana de Gales. Otra cursi de espanto.
¿Alguna mujer que haya tenido 2 hijos -2- puede mirar como miraba ella por el rabillo del ojo como si fuera una tímida pastorcilla de tipo virginal? Jolin, macho, las mujeres pasada la adolescencia miramos a la cara a los tíos, no vamos de "no he roto un plato" y me sonrojo. A no ser que seamos unas lagartas de tomo y lomo, entonces sí que bajas los ojos.
Este tipo de cursi y mosquita muerta atrae un montón y es causa de muchos males.
Yo veo Mogambo y no me puedo creer que Clark Gable dude entre Grace Kelly, que es un puedo y no quiero, soy decente pero quisiera, pero no me atrevo, pero sí, pero no.... etc. etc...Que es de ese tipo de cursis, es que no hay más que verlo... (no digo en otras pelis, en ésta, eh?) Y narices: AVA GARDNER que es un pedazo de pibón para hacer temblar el misterio.
Pero es atávico, forma parte de cierto pecado original de algunos tíos, los guionistas bien que lo sabían...
La cursilería tiene una edad propia en la mujer en torno a las 3 - 6 años. Yo lo he visto con mis sobrinas. Es la edad rosa, tiene su gracia, ya a los padres les hace su gracia ver a las niñas con todas las Barbies y las Bratz de ahora, que mira que son de horror...
Luego si tienes hermanos y te canean un poco -a pesar de que los niños no pegan esto es la teoría, la práctica es que sí- se te pasa. Pero vuelve.
Vuelve en la adolescencia y por eso habitualmente las puestas de largo eran y son un horror porque a los 16 años está tirado ser cursi.
El momento boda da también para mucha cursilería. Pueden sumarse la madre, la suegra y la novia en un intento de hacer aquello una fantasía de cursilería. El novio de manera habitualmente prudente se aparte y les deja hacer.
Luego ya las mujeres suelen estar muy ocupadas con el trabajo, los niños, la casa, todo, para ser cursis. Aunque hay fantásticas excepciones que nos muestra el Hola y demás medios.
Y luego hay un momento crucial en la vida de una mujer. Fundamental.
Porque la cursilería acecha y hay que estar preparadas. Es a eso de los 40. ¿Razones? Ya las expliqué en la entrada anterior: miedo a que nos nos quieran como somos. Y somos, todas, Raquel Welch, pero la líamos, la liamos porque hacemos caso a quien no debemos.
Moraleja: para averiguar qué les gusta a los hombres estética y afectivamente hablando, conviene preguntar a aquellos hombres a quienes les gustan a rabiar las mujeres (perdón, es una manera de hablar pero creo que se entenderá)
Es a los 40 cuando una elige si quiere ir hacia la matrona romana (o andaluza, lozana andaluza o tal) o hacia enjuta castellana, flaca pero divertida.
Estos dos modelos, que son los de nuestras ancestras, deberían guiar nuestros pasos, tanto estéticos como sentimentales, pero no, no lo hacemos y desembocamos habitualmente en otros, que nos son foráneos, y el colmo de la cursilería(física y de alma).
Yo se lo digo mucho a mis hermanos. Por favor, si veis que me deslizo en algo a lo Ana Obregón decídmelo inmediatamente. Es tan evidente que sería raro caer, pero por si acaso. No es solo el arreglo, que es como si la vistieran sus enemigos, es todo. Y hay un montón de Obregones con variación, menos evidente, pero cursis: Dios mío ¿que se hace la gente en la cara, en las tetas?
Pero ese no es el único peligro. Hay mas. Podemos pensar que Ana Rosa, que parece como más inteligente, es el modelo de mujer a los 40. Una tipo de mujer que lo tiene "todo" y además ese todo muy claro, como congelada en el tiempo -los gémelos perfectos, dinero a espuertas, la reina del mambo. Y que da lecciones, ayyyyy.
Cuidadito que es una cursi de cuidado, de tomo y lomo. Como menos evidente que la Obregón, pero como mujer letal, pero totalmente letal en su cursilería.
Lo siento, pero para evitar caer en lo cursi, que puede ser tentador, cuando cumples los 40 hay que ser matrona romana feliz o enjuta castellana saltarina, Modesta o tía Tere, mis dos modelos de mujer. A una se le subían los nietos de mullida que estaba, la segunda se dedicaba al vino en Rueda: mujeres con algo que decir y que hacer.
Para que se vea como más atractivo, para las cinéfilas: tipo italiana -elige la que quieras, son todas geniales- o tipo Lauren Bacall, Diane Keaton, Katherine Hepburn.
O gorda estupenda, todo curvas, placidez de la carne y tal, o con arrugas y estilo.
Pero con dignidad, por Dios. Sin cursilerías, a los 40 tampoco, por favor. Que un alma caritativa nos lo diga, con cariño, pero que nos lo diga.
Sigo luego con los tíos.
"Pero hay feas cursis. Maria Teresa de la Vega es un ejemplo diré que paradigmático"
ResponderEliminarJua, jua, jua, jua, jua, jua
Por favor, esto da para escribir un libro. Me pido ser coautor con otras vertientes que complementen la cosa.
Ah, la Bacall es una de las mujeres más subyugantes del cine. Lo mismo que la Gardner o la Loren. El morreo de Charlton Heston a la Loren en "El Cid" es una de las cosas más auténticas del cine, lo mismo que John Wayne y aquella pelirroja en "El hombre tranquilo".
Ah, peliculón El hombre tranquilo, por favor, un clásico, la tía que si quieres arroz catalina yo sin dote no voy a ninguna parte. Susan, Hawwort o como se escriba, y que sepas que vivía al lado de mi casa en Ireland... (vivió, quiero decir).
ResponderEliminarAy, las mujeres pelirrojas que es que tenemos un aquel... (aunque seamos teñidas, es igual)