domingo, 9 de enero de 2011

En busca de María Blanchard

Hay proyectos que tardan en madurar. Llevo dos años casi documentándome sobre María Blanchard. Me falta hablar con determinadas personas, a ver si puedo. No sé con qué fin, la verdad. Pienso a veces en una novela en dos tiempos, hoy y entonces, otras en un ensayo o en una biografía. Leo, recojo información, tengo una caja de cartón y otro archivo en mi ordenador donde voy dejando documentos e imágenes de cuadros. Y hago listas: frases suyas, personas que trató, cuadros con título y año en que lo pintó, necesito ver las épocas, conocer qué han escrito sobre ella (no puedo hacerme con todos los textos importantes, voy a poco a poco, algunos tienen más de 70 años). También empecé, como Perlado me dijo, con apuntes, notas, esbozos, retazos de lo que voy viendo o leyendo bajo títulos que pongo que van por parejas o por temas o por extraños encabezamientos. Tengo anotaciones mías de ideas, frases, pequeños párrafos inconexos todavía, retalitos parecen.

María y Diego Rivera en Goya 27. Aprendiendo con Sotomayor. Aprendiendo con Anglada Camarasa. “La bruja, la bruja”, así le gritaban por ser jorobada por la calle. Profesora en Salamanca por poco tiempo, irrespirable esa España tan bestia. Juan Gris. Lothe. Liptchiz. Fuera Gutierrez Cueto, solo Blanchard. Cubismo humano. Luego distinta, española siempre. Si no fuera por su ternura hubiera sido muy negra. Sus maternidades tan esféricas. Los niños omnipresentes. Y esa niña de primera comunión rígida, tan real, tan por fuera, luego he descubierto que hay varios cuadros, uno el original, otro la réplica que ella misma hace. “No, no, es mejor la belleza”, contestando cuando le hablaban de su talento. Su vestido de colores, de cuadros, el arreglo extraño. ¿Viajes? Sé que viajó, pero no encuentro documentos. París, frío y hambre, pobreza. El taimado Rosenberg. El rey Gustavo de Suecia. “¿Por qué hacerlo”, la frase del dominico confesor cuando ella quiso dejar la pintura. Acogiendo a su hermana viuda con hijos en París. San Tarsicio, el poema de Claudel. El “Pintaré muchas flores” que dijo a su muerte. Tantísimos cuadros, trabajó incansablemente.


No sé qué cómo voy a hacerlo. Pero me lo estoy pasando muy bien. Es una pintora tan buena y una persona tan admirable, que solo aprender sobre ella me basta por el momento. A veces explorando sin saber muy bien por dónde se acaba por encontrar la palanca, el punto de apoyo de un texto, de un personaje, de una historia, el enfoque, el formato. Veremos. Si no, no habré perdido el tiempo.
(La foto es de María Blanchard con Jaqueline Rivière, discípula suya. El cuadro es "Niña del brazalete", 1922-23)

14 comentarios:

  1. La fase de documentación suele acabar siendo reconfortante, Aurora, y quizás te descubras a ti misma un día trazando el esquema de tu futura obra tras encajar mentalmente lo recopilado.
    Buena suerte y buen trabajo.
    Besos.

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  2. Ahora es el momento de escribir esa historia.

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  3. Emocionante y profunda. Así será tu narración, tu novela, como su vida.

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  4. Tal como está el panorama, tiene mejor salida un ensayo que una novela.

    Saludos.

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  5. Escribe algo muy Máster. Que no pueda ponérsele etiqueta. Escribe algo que tenga vida. Me dan ganas ya de conocerla.

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  6. Por lo que cuentas, es una historia interensantísima. Ánimo y al toro... Si me permites una sugerencia, échale un ojo a la trilogía de biografías de Jean Echenoz que publica Anagrama. De momento ha escrito las 2 primeras: "Ravel" y "Correr". Esta última trata sobre Emil Zatopek, atleta mítico. No es biografía al uso. No es novela, tampoco. Pero son las dos cosas a la vez porque se lee con la fluidez de una ficción.

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  7. Impresiona esta entrada.

    Y hay mucho de la España negra en los insultos de "La bruja, la bruja" (los "motajos" de los que hablaba Unamuno, "¡El loco, el loco!", que le decían a Juan Ramón Jiménez los niños por la calle)

    PS: Noticias del fin del invierno, almendros en flor en las faldas del cerro del Castillo de Jaén.

    Saludos cordiales.

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  8. En este caso el personaje es tan interesante además, JM, que me lo estoy pasando genial.

    Jesús, cuando acabe Abuelitas Malditas. La tengo que acabar en febrero, llevo ya un mes de retraso.

    Anónimo, quien seas, sí, María era una mujer profunda, eso me atrae. Y tierna, lo mismo. La frivolidad me espanta.

    Sombras, estoy de acuerdo, lo que me dice Javier es una muy buena idea.

    Lolo, guapa, eso es, vida. Te va a encantar María.

    Javier, MIL GRACIAS. Oí la crítica sobre el libro de Zatopek y me pareció muy bueno. Ahora ya con lo que tú me dices... Me hago con él, mañana voy a la biblioteca.

    Retablo, y la época era apasionante también. Y la elegía que le dedica Lorca a su muerte es una maravilla. Y muchas cosas, su conversión al catolicismo, su relación con Juan Gris, su sentido del humor, su entusiamo infantil que relata Isabelle Rivière.
    ¡Ya sabía yo que Vd. iba a ser un corresponsal estupendo! Aquí hoy nada más que lluvia, lo cual no quita para que a las 4 los pájaros estén emocionados, los gorriones, mirlos... ¿Estarán emperajándose? Voy a consultar a Jesús Dorda, que es el experto...

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  9. Apasionante la aventura que emprendes, Aurora.

    Espero que además de disfrutar tengas mucha suerte.

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  10. Gracias, Alejandro, es mucha suerte ya pasarlo bien.

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  11. Estoy muy interesado en la vida de Maria Blanchard, prima carnal de mi abuelo Eduardo Blanchard. Puedo proporcionar datos sobre sus antepasados porque llevo años "rebuscando" en archivos y bibliotecas.
    No quisiera que volviesen a aparecer en la biografía de Maria algunos errores que se están convirtiendo en habituales y que desvirtúan su imagen.

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  12. Kikeblan, he intentado ver su email, pero no lo encuentro en su perfil... sería tan amable de dármelo al mío masterennubes@gmail.com?

    Si hay algo en lo que tengo interés es precisamente en contactar con la familia, escribí a Jesús Ortiz, que está en Santander, no sé si me ha contactado a través de él, en todo caso, me encantaría poder hablar con Vd, llevo a la búsqueda de familiares hace tiempo.

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  13. una pequeña correccion,
    su hermana no era viuda cuando vivio con ella en Paris..
    saludos
    s egea

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  14. Zsa,, Zsa, pues estaré equivocada, el caso es que lo leí así en alguna parte, repaso mi documentación y te diré dónde lo leí... Muchas gracias por la corrección.

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